Cada vez que oigo las notas iniciales de Under The Bridge, ese clásico de tono triste de los Red Hot Chili Peppers (que se presentarán por primera vez en Colombia el próximo 11 de septiembre), regreso mentalmente a mi antiguo apartamento en Cali. Recuerdo esa tarde en la que Caro, la ex novia de mi amigo Leo, cogió mi lamentable guitarra acústica, puso los dedos en las cuerdas correctas y pulsando con firmeza tocó el inicio de ese tema. Era una de esas tardes caleñas en las que nada pasa. Estábamos ahí los tres, perdiendo el tiempo. Viendo videos. Creyendo que habíamos crecido. Camisetas blancas. Blue jeans. Calor. Tomé mi Handycam Sony Video 8 (una novedad en esos días) y la grabé mientras interpretaba las notas. Luego puse esos memorables segundos en un extraño video –extraviado, por desgracia– en VHS. Caro y Leo terminaron tiempo después. Ella vive en Suiza, es mamá, no sé si volvió a tocar la guitarra. Leo, después de muchos años, dejó Cali y se vino a Bogotá. Creo que se vieron una vez cuando él viajo a Europa. Leo me compró la boleta de VIP para ver a los Chili Peppers en septiembre –aún no se la he pagado–. Muchos se quedaron sin tiquetes. Ojalá toquen la canción en el concierto. Esta es Under The Bridge, si quieren cantarla, si no se la saben de memoria, aquí está la letra.
T.A.P.: The Anxiety Project 
No suena más mi guitarra… de vez en cuando grita bajo el ataque de 4 pequeñas manitos. Con cuerdas aún pero sin tonos correctos, acompaña una cumbia, un vallenato, unas cuantas letras de Fito o de Calamaro (aclaro que no soy yo la que canta). Ahora mismo mientras disfruto un rarìsimo momento de soledad me permitì volver a leer tu blog y lo único que puedo añadir a ese recuerdo compartido de aquella tarde calurosa es la imagen de mi Leo querido con sus converses rojos y el pelo largo. Y vos, todavìa tocas tu guitarra?
Carolina.
Sí, Caro, aún toco la guitarra, eso sí, peor que antes, que ya es mucho. Es tal mi descaro que tengo dos, una acústica y otra eléctrica, creo que la segunda, con la ayuda de la distorsión, les hace creer a los vecinos que estoy inventando un nuevo género ruidoso. A veces, otras dos manitas (las de mi hijta Antonia) rasgan las cuerdas también. No recordaba los converse rojos de Leo, pero sí que en esa época estaba calvo y que se había dado un golpe en la cabeza. Viejos y acalorados tiempos. Te recordaremos en el concierto de los Chili Peppers. Un abrazo. Patxo.
Ǫuee tal,
No est mal el articulo. Hay otros articuos no me convencierоn tanto, еn cualquieг caso, en general estn bastante bien.
Saludos!